MACARRÓN

Gatos en adopción

Sexo: Macho

Raza: COMÚN

Tamaño: Pequeño

NOMBRE: MACARRÓN RAZA: EUROPEO SEXO: MACHO CASTRADO: SI EDAD: 3-06-2018 CARÁCTER: MUY BUENO Y CARIÑOSO MANTO: BLANCO Y NEGRO TEST: POSITIVO EN INMUNODEFICIENCIA FELINA HISTORIA DE UN GATO CALLEJERO. MI HISTORIA: Hola, me llamo Macarrón y os voy a contar un poco mi historia. Yo soy un gato callejero y nací en una colonia de gatos en Torremolinos. Yo era un gatito muy feliz rodeado de mis hermanos y mi madre. Allí alguien diariamente nos traía de comer para que mi mamá estuviera alimentada. Yo un día empecé a encontrarme un poco mal, noté como empecé a resfriarme un poco se me llenaban los ojitos y la nariz de secreciones hasta el punto de que me desplazaron de la colonia o yo me empecé a apartar, no recuerdo bien... Eso hizo de que no pudiera comer y cada vez estuviera más débil, me costaba respirar y casi no veía. Parecía que solo esperaba a la muerte. Un día una chica voluntaria de la protectora vio que estaba en muy mal estado e intentó cogerme pero no fue posible, pero ella siguió buscándome. Al par de días una señora iba paseando su perro y me vio. Yo estaba más débil aún y más delgado, esta señora no dudó en llamar a su hija ya que ella sabe cómo manejar animales enfermos. Fueron con una toalla para intentar cogerme, pero yo aún estando débil intentaba evitarlas, ya que sentía miedo. Su hija consiguió cogerme y con una gasa comenzó a limpiarme los ojos, la nariz, y la pus de la boca. Ella se asustó mucho ya que vio la gran úlcera que tenía en la boca y la cara inflamada.  Estas buenas personas aún teniendo tres gatos en casa no dudaron en llevarme con ellas y mantenerme aislado en uno de sus cuartos de baño separado de sus tres gatos. Ellas tenían mucho miedo porque pensaban que podía fallecer en cualquier momento...  La hija de la señora comenzó a administrarme un antibiótico para la infección de la boca y ojos y un mucolitico para las secreciones. Como no podía comer por el gran dolor que tenía en la boca ella me daba con una pequeña jeringa suero para mantenerme hidratado.  Esa primera noche yo seguía muy muy débil, pero comencé a hacerle muestras de agradecimiento, ya que ella no tuvo miedo en acogerme y darme caricias y abrazos, yo le respondía cada vez que la veía con ronroneos.  A los dos días estaba un poco más activo y empecé a comer comida húmeda (lata de veterinario) diluida con agua, y comencé al poco tiempo a hacer pis y popo, ella se puso muy feliz ya que la cosa iba pintando mejor. La ulcera cada vez me molestaba menos gracias a las curas diarias que me hacía.  Hasta que pude comer pienso duro, me sentía mucho más fuerte y cogí peso, pero ella desconfiaba de que pudiera tener alguna enfermedad, como por ejemplo, el síndrome de inmuno deficiencia felina, ya que llegue en ese estado y más siendo de la calle. La señora un día se encontró a la voluntaria de la protectora y le comentó que acogió con su hija un gatito que estaba muy enfermo, y casualmente era el que ella buscaba, a mi. Se puso muy feliz al saber que yo ya estaba a salvo! Intentaron buscarme familia pero no tuvo éxito. Los días se iban haciendo cada vez más duros, porque no podían quedarse conmigo más pero a la vez había más cariño mutuo.  La voluntaria me recogió y me llevo a la protectora para que siguiera recuperándome, me pusieron en cuarentena para seguir administrándome medicamentos y hacerme pruebas. Di positivo en inmunodeficiencia felina. Ellas allí me tratan muy bien y me dan mucho cariño, pero me gustaría sentir otra vez el calor de una familia que me abrace y me den caricias. Hace poquito salí de la cuarentena a un patio más grande, pero me siento muy asustado, huyo de todos y siento inseguridad, supongo que será cuestión de tiempo, aunque cada día confió mas en las voluntarias que me cuidan y miman, Soy un gato muy guapo lleno de amor, soy muy cariñoso y agradecido. Aquí podréis ver mi evolución.  Busco una familia que me de mucho amor, mi enfermedad no es un problema para los humanos ni otros animales, y puedo convivir con otros gatos igual que yo (aunque en gatos con inmuno, castrados y bien presentados puede puntualizarse). Por favor, no me niegues la oportunidad que tanto necesito. Yo puedo tener una vida normal, larga y feliz sin el más mínimo problema cuidado en un hogar como cualquier otro gato. Los gatitos como yo también tenemos derecho a ser felices como cualquier otro. ¿Quieres ser quien me brinde esa felicidad? ¡Te estaré eternamente agradecido! ¡Gracias! Si estas interesad@ o necesitas mas información, escríbenos a gatos@protectoramalaga.com