Raza: Bobtail X

Edad aproximada: Menos de 1 año

Tamaño: Grande

Ref: 21693

A pesar de tener menos de un año, tenemos mucho que contar de Bob, y es que, desgraciadamente, no dejamos de sorprendernos con algunos casos.

A Bob nos lo trae la policía al refugio, rescatado tras haber estado (ni queremos saber cuánto tiempo) atado a una farola con el bozal puesto. La familia con la que vivía lo maltrataba, y un día, se decidió que lo que había que hacer era atarlo y dejarlo atrás. Un día se decidió que se habían cansado de hacerle daño, de abusar de él. 

Y eso es todo lo que él conocía.

Y ahora lo miramos y solo podemos sentir impotencia, ya que, evidentemente, Bob tiene muchas heridas en el corazón. Fue culpa del humano su dolor, y nosotros pensamos que de la misma forma, es nuestra responsabilidad escucharlo y quererlo.

Es un cachorro que necesita una familia que esté dispuesta a conocerlo en profundidad y a leerlo, ya que llega a unos niveles de excitación muy altos de manera rápida. Es por eso que nosotros debemos gestionar su excitación y enseñarle a él cuáles son los límites.

Por suerte, Bob es tremendamente inteligente, y adora aprender cosas nuevas. Es muy glotón y siempre está dispuesto a trabajar con los voluntarios. A nosotros nos emociona ver su alegría y sus ganas de vivir, sus ganas de superarse todos los días.

No le gusta compartir la comida ni los juguetes, pero poco a poco está aprendiendo a confiar en nosotros, y eso es lo que este pequeño necesita. Buscamos para él una familia que quiera formar un vínculo con él basado en la confianza.

Cuando confía en ti, Bob es un perro de lo más cariñoso y alegre. Le encanta sus ratitos de patio, jugar con nosotros y el contacto. Nos mira con esos ojitos color miel llenitos de amor y nos derretimos. No entendemos cómo alguien pudo mirar a esos mismos ojos y hacerle pasar por un infierno.

Además, pasea muy bien a nuestro lado y actualmente convive con una hembra miedosa sin ningún tipo de problema.

Es todavía muy joven y tiene toda una vida por delante. Por eso esperamos que haya alguien que nos esté leyendo ahora mismo y lo vea como nosotros lo vemos, alguien que sea capaz de darle la vida que nunca ha tenido y que tanto se merece.

Si te ha conmovido su historia y quieres conocerlo, escribe a