Nuestro abuelo tiene 9 años, parece un lobo, tiene un pelaje largo y suave. No sabemos mucho de su pasado, pero no debió ser un perro cuidado y feliz. Llegó a la protectora con mucho miedo y un poco de desconfianza, pero en solo unos días parece otro, pide carias, se deja poner la correa, hacer sus curas...
Geppetto es un perro tranquilo y noble que a su edad no se merece dormir sobre el cemento frío de los cheniles. Convive con otros perros, machos y hembras, y estamos seguros de que se adaptaría a cualquier tipo de familia.
Si quieres cambiar, por fin, la vida de Geppetto puedes acogerlo, mientras aparece su familia, o adoptarlo. Para eso escríbenos un mail a